Siempre me ha gustado la fotografía en blanco y negro pero cuando llega el momento de retocar las mías siempre terminan en color. Así que esta vez decidí que mi acabado sería otro.

Obviamente cada fotografía necesita un retoque diferente, por lo que tu necesitas estudiarla detenidamente para saber qué es lo que necesita y determinar qué retoque sería el más adecuado.

Teniendo en cuenta eso, debes tomar tus fotografías con el ajuste de color fiel que te ofrece tu cámara, una vez hecho esto, cuando estés sentado frente al ordenador es cuando podrás decidir qué tipo de retoque prefieres.

En mi caso, se presento la oportunidad de hacer eso cuando visité Cork. El tiempo era lluvioso y con las nubes no podías ver color alguno sobre la ciudad por lo que aproveché la ocasión sabiendo que quizá esta vez si que podría hacerlas en blanco y negro así que aquí te dejo algunas de las instantáneas que pude capturar ese fin de semana.

Espero que te gusten.